En mi anterior artículo –Mi paso por #lared140– sobre el primer evento nocturno de redes sociales, ya dejé claro la gran categoría profesional de los ponentes, y ahora quiero hacer incapié en uno de ellos: Juan García Álvarez (@blogoff) que nos presentó su taller «Cómo exponer ideas. Más allá de la muerte por PowerPoint«.
Empezó puntualizando que el título se extendía a cualquier otra aplicación o herramienta de presentaciones, como por ejemplo Prezi, SlideShare, etc.. y es que con cualquiera de ellos se aplica igualmente.
Expuso con gran claridad, y en muchos momentos con gran humor, varias claves para que en cualquier presentación que hagamos no se pierda la atención e interés de los asistentes:
- Una Presentación NO son apuntes. Son 2 cosas totalmente distintas y diapositivas con párrafos y más párrafos de texto que deban leerse al pie de la letra, pueden ser un motivo de desatención o cansancio del asistente.
- Una imagen vale más que mil palabras y elegir la adecuada hará que el espectador comprenda fácilmente lo que se expone. Pero no hay que caer en el error de poner una imagen tan espectacular o llamativa porque no haría otra cosa que desviar la atención.
- El uso de listas numeradas o sin numerar debe ser comedido. Aunque difícil debe ser cumplir esta recomendación cuando el mismo profesor las usó en varias ocasiones, hasta el punto de reconocer (humorísticamente) que se la había saltado.
- Procurar no usar flechitas y dibujos en movimiento que pueden distraer.
- El tipo de letra (fuente) debe ser profesional y legible, sin florituras y, a menos que la audiencia sea infantil, no usar la fuente Comic Sans.
- La combinación de colores (fondo, fuente, etc..) debe ser cuidada para que sea legible. En internet se pueden consultar infinidad de páginas con combinaciones ya probada su efectividad y gusto popular.
- Tener presente en todo momento el objetivo de la presentación, que en la mayoría de las veces será Inspirar, Enseñar, Vender o Convencer.
No había tiempo para más. Las actividades en Zaragoza Activa no cesaban y había que dar paso a otro taller pero con lo expuesto ya sabemos que hacer para no matar nuestras presentaciones y que el público se canse, aburra o abandone la sala.
